El ministerio de música es un grupo parroquial compuesto por laicos de varias edades. Los Cantores fueron originalmente designados por el Rey David, que también era un
Cantor, para encargarse del culto a Dios en la tienda del encuentro, y dirigir al pueblo en
la alabanza y en la adoración. Tiene lugar cada semana y tiene como objetivo aprender técnicas de canto, ensayar las canciones más representativas del ámbito eclesial y hacer vida en comunidad. es un llamado hecho por Dios a algunos, los cantores, para dedicarse a servirle en el culto; son los encargados del servicio litúrgico durante los domingos en la Santa Misa.

Reconocer que somos instrumentos del Señor,  como nos decía San Francisco de Asís: «Señor hazme un instrumento de tu paz…» 

El ministerio de la música es eterno, todo el pueblo ha de cantar alabanzas a Dios
eternamente. Lo que hacemos en la tierra es un “gran ensayo” para la alabanza del
cielo.